Ayer os avisé del sorteo que podéis encontrar en el blog de beautyvictim donde sortean el gadget más famoso de Sephora: Clarisonic Mia2.
Ahí os adelanté de que estaba preparando un tema que consideraba interesante y sé que nunca habrá suficiente información al respecto. Se trata como indica el título de la entrada, del acné. Más bien del acné repentino.
Debo decir que mi caso no es grave. Pensándolo fríamente. Pero es verdad que siempre nos preocupamos un montón por nuestro aspecto y llegado el momento nada nos consuela. Sabed que esto no ocurre de la noche a la mañana, pero para las personas que como yo, nunca ha tenido problemas de acné salvo los casos típicos de acercarse al período de la menstruación y que se salgan los típicos granitos hormonales, zona barbilla, alguno puntual por mejillas y ya.
Por el mes de Junio, poco a poco, y días tras días, notaba que me salían granitos, uno, dos... Y no les daba tiempo a desaparecer cuando ¡PUM! Aparecían otros dos. Así me tiré una temporadita. Pensaba que sería el verano: sudor, piel más grasa, tampoco puedes estar lavándote la cara todo el tiempo...Y paso Julio, Agosto y ya a últimos del mes Septiembre pensé esto no es normal y fui a mi médico de cabecera.
Lo primero que me dijo es que no era grave, a lo que yo le di la razón, pero que quería un tratamiento porque esa situación no era normal en mi y quería ponerle remedio lo antes posible ya que había notado que poco a poco en vez de mejorar iba yendo a peor. Bien, me recomendó dos cremas más un limpiador de Avène (del cual tengo preparada una entrada sola para el). Tenía que lavarme la cara con el cleanance de Avène mañana y noche. Por la mañana además tenía que usar Dalacin Emulsión (se consigue con receta médica) que si leéis el prospecto indica que su uso es para el acné vulgar y es un antibiótico del grupo de lincosaminas, con acción bacteriostática frente a aerobios gram+ y amplio rango de bacterias anaerobias. Por la noche, tenía que limpiarme de nuevo bien cara y cuello con el cleanance de Avène y usar otra crema en gel Differine 0,1%. Y no darme nada más. Cero maquillaje.
La verdad que aguante los primeros días sin maquillaje y porque cayó en fin de semana y fue de estos fines de semana que estás super tranquilos en casita, sin salir, en plan de ver pelis y tal. Si no, no se yo si hubiera llegado a los cinco días.
Bueno, estuve así tres semanas, de Lunes a Viernes por el trabajo, que si viene gente y lo típico la gente te pregunta, te incomoda, así que al final opté por maquillarme y olvidarme de complejos... Fines de semana, libres de maquillaje. Incluso me acerqué un sábado por la mañana a hacerme una limpieza facial para ver si la cosa mejoraba.
Justo el día que cumplía las tres semanas con el tratamiento de las cremas, tuve que volver porque a parte de no ayudarme nada de nada, ví que me comenzó a salir acné (muy pequeño, granitos minúsculos, pero varios) por la zona del escote, cuello...
Esta vez salí de la consulta contenta ya que conseguí que me enviara al dermatólogo y me recetó unos antibióticos que lucharían desde dentro, como quien dice, contra el acné. A parte me dijo que lo que yo quisiera, si quería podía seguir además con las cremas o dejarlas a un lado. Sinceramente sólo por el precio de lo que me costó todo, seguí adelante (hay que amortizar :P).
Bueno, a los doce días desde esto he tenido que volver de nuevo a consulta, sin tomarme el antibiótico durante dos días porque por todo el cuello me causó reacción alérgica, todo rojo, que picaba... En fin. Una locura. Ahora, actualmente, he tenido que dejar el antibiótico y tengo cita también con el alergólogo ya que hay que verificar si ha venido de los antibióticos y si es así, a qué antibióticos tengo alergia.
Ahora mismo estoy algo decepcionada, ha supuesto un paso hacia atrás, en verdad no sé si hay alguna diferencia desde el principio, yo no me noto nada. Por lo que he vuelto al Dalacin + Differine.
Por mi cuenta, compré el paso 2 de Clinique (el clarificante) que uso por la noche antes de darme el differine. Por la mañana antes de usar Dalacin, he incorporado a la nueva rutina el uso de mi crema hidratante habitual ya que se me estaba resecando mucho la cara y la notaba tirante. Además de seguir con el cleanance de Avène que ha sido todo un descubrimiento.
Ahora, solo me queda esperar a ver al dermatólogo.
Pero bueno, esto es un resumen extenso de los primeros pasos a dar, depende del médico que tengas te tardará más o menos en enviar al dermatólogo. A mí ya os digo que fue en la segunda consulta y porque se notó que claramente iba a peor.
Por lo que, no tengáis vergüenza y:
1. Consultar con vuestro médico de familia.
2. Seguid los pasos que os dé al pie de la letra y pensad que resultados no los vais a ver de la noche a la mañana por lo que no os desaniméis y seguid adelante.
3. Si no notáis mejoría, volved a hablar con vuestro médico e insistid y hacer hincapié en que os vea un especialista.
4. Por mucho que leamos en Internet las opiniones, historias y casos de otras personas, de lo que han probado, de lo que les ha funcionado y demás, no presionéis al médico, a fin de cuentas es el experto y te propondrá el mejor tratamiento que a tu piel le convenga.
5. Tened muchísima paciencia. Mucha. Es largo.
Según vaya avanzando en la investigación y probando productos y tratamientos visto al dermatólogo, os iré contando las delicias y desventuras de este viaje.
Hasta el próximo capítulo de este paso a paso.
¡Un beso!
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